lunes, 11 de junio de 2012

El duro trabajo de un cerrajero


Nuestros oficiales cerrajeros, disponibles 24 horas, no tienen precisamente un trabajo sencillo. Y no porque tengan que estar pendientes de las urgencias, sino por lo delicado de su oficio. Se trata de instalar, reparar y mantener todo tipo de cerraduras, candados, cerrojos y cilindros de puertas comunes y vehiculos, y el mecanismo de cada uno puede ser una materia de estudio independiente, una maravilla del ingenio. 
La magia del cerrajero es abrir una cerradura sin necesidad de llave, he aquí la clave de su aptitud. Aunque el taller donde trabaja un cerrajero es la cerrajería, debe estar dispuesto para trasladarse a cualquier lugar de su ámbito de trabajo en el mínimo tiempo posible. 
Un cerrajero puede crear una llave maestra, aunque sólo para un grupo determinado de cerraduras muy específicas, no existe una llave maestra universal. Un cerrajero experimentado es capaz de fabricarlas mediante un proceso llamado amaestramiento de llaves.
La modalidad más común para fabricar llaves es a partir de una muestra usando una máquina duplicadora, y una variante más complicada es aquella consistente en confeccionar una llave que a priori no existe, utilizando sólo la cerradura o candado. Es un procedimiento más difícil y costoso, ya que precisa el desarme del cilindro y una confección manual usando limas de precisión. 
Estos son sólo unas pinceladas de lo que puede este complejo arte llamado cerrajería ejecutado por un maestro cerrajero como los que dispone el Grupo Vico. 

Un ejemplo de cerrajero en acción:

Fuente | Wikipedia

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